Otro libro que trata este mismo tema de un modo actual, es uno de la editorial Grijalvo, y que se titula “Los diez hábitos que lo llevarán al éxito".
Su autor es Robert V. Ringer. Su premisa básica es que el éxito viene cuando se comprenden y practican los 10 hábitos siguientes.
1. El hábito de la realidad –de la verdad–. Ringer destaca varios conceptos importantes. Dice: "El éxito raramente llega a las personas que tienen una visión defectuosa de la realidad". Afirma que el principal reto que tenemos es el miedo a la verdad: "No nos gusta oír la verdad, tratamos de hacer pasar por verdadero aquello que nos gusta". El autor recomienda buscar siempre la verdad, buscar el porqué de las situaciones y problemas, buscar el conocimiento y la sabiduría para entender y comprender la realidad. Pero, sobre todo, dice: "Recuerda que todo lo que haces tiene consecuencias positivas o negativas". Y como corolario del mismo comentario recuerda que a cada quien le dan lo que se merece, que "casi siempre se paga por algo imprudente o inapropiado".
2. El hábito de la actitud positiva. El autor hace referencia al mensaje del psiquiatra Viktor Frankl (famoso por tratar a judíos provenientes de campos de concentración): Tenemos el poder de elegir la actitud ante una determinada circunstancia, ante un problema, ante un triunfo o ante una adversidad. Recuerde lo que decía Eleanor Roosevelt: "Nadie te puede hacer sentir inferior sin tu permiso".
3. El hábito de la perspectiva. Ringer recomienda internalizar la siguiente premisa básica: "Contempla las situaciones y problemas en su nivel de importancia relativa". El insiste: "Todos tenemos problemas, pero el hábito de la perspectiva implica no hacerlos más grandes de lo que son". Recuerde no es lo mismo un mal aumento de sueldo que perder el empleo.
4. El hábito de vivir el presente "El comentario lo hizo mi cuñado al sacar del ropero un vestido nuevo para ponérselo a su esposa en el día de su muerte y que mi hermana había comprado hace tiempo; lo tenía guardado, sin usar, porque lo quería para una ocasión especial". ¿Cuántas cosas tiene usted guardadas para una ocasión especial? Viva el presente, recomienda este hábito.
5. El hábito de la moralidad. Cuando leí el comentario de Ringer: "Sólo hay un modo de proteger nuestra integridad: permanecer atentos y vigilantes para no comprometerla", vino a mi mente el efecto corruptivo de las tres g's que Billy Graham recomienda evitar para conservar el liderazgo: el efecto corruptivo del dinero (gold), de la fama (glory) y del sexo (girls or gentlemen).
6. El hábito de las relaciones humanas. Sin duda éste es el hábito de tratar bien a los demás, el hábito de no hacer a los demás lo que no quieres que te hagan a ti, el hábito que implica discreción, respeto, afabilidad y tacto.
7. El hábito de la simplicidad. "Resolver los problemas de la manera más sencilla es siempre un excelente camino para obtener resultados". Es la versión moderna de la navaja de Ockam que estudiamos en filosofía en el instituto.
8. El hábito de eliminar a la gente agotadora. Insiste en evitar tratar con gente "que nos quita nuestro tiempo, nuestra energía, nuestra paz interior, nuestro dinero y nuestra seguridad y autoestima".
9. El hábito de la autodisciplina, del autocontrol. Cuando leí esta parte del libro vino a mi mente el libro de Goleman –Inteligencia emocional–, en el que destaca que: "Nadie quiere trabajar con un erudito intelectual y al mismo tiempo con un troglodita emocional". Sin duda, el que pierde el control de sí mismo siempre pierde en su relación con los demás; así que échele ganas, no se enoje. Recuerde que el que se enoja, pierde.
10. El hábito de la acción. Recuerde que los sueños y hábitos en nada concluyen si no los aterrizamos en hechos concretos.
En definitiva se trata de hacer cosas por nosotros mismos y no esperar que la Divina Providencia nos saque del atolladero. En esencia se trata de admitir que todos tenemos problemas, pero hacerlo con perspectiva y sencillez nos ayuda a resolverlos.